La importancia del pensamiento crítico en el trabajo y qué conexiones tienen con el Design Thinking

“Creer es más fácil que pensar.
De ahí que haya más creyentes que pensadores”.

Bruce Calvert. El pensamiento crítico no es un privilegio, es una necesidad.

Es una habilidad esencial en el entorno laboral ya que nos permite analizar situaciones de manera objetiva, resolver problemas de manera efectiva y tomar decisiones informadas. Fortalecer tu pensamiento crítico te convertirá en un perfil valioso y te ayudará a enfrentar los desafíos laborales con éxito. El pensamiento crítico es considerado la segunda habilidad más importante para los trabajadores, después de la capacidad para resolver problemas complejos, según el informe anual «The Future of Jobs» del Foro Económico Mundial.

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¿Por qué cada vez es más necesario el Pensamiento Crítico?

El cambio hacia estructuras organizativas más horizontales ha aumentado la necesidad de que los empleados tomen decisiones autónomas y utilicen habilidades de pensamiento crítico. Esto se debe a que el pensamiento crítico es fundamental para resolver problemas, tomar decisiones y discernir información relevante en la sociedad actual basada en la información.

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¿Cómo podemos potenciar el Pensamiento Crítico?

Para dar respuesta a esta pregunta nos vamos a ayudar con la metodología de Innovación Design Thinking para establecer puntos de contacto entre ambos pensamientos. Si aún desconoces esta metodología te recomendamos que te hagas ya con este libro "Designpedia. 80 herramientas para construir tus ideas. Pero por ponerte un resumen rápido: “El Design Thinking es ante todo un método creativo de resolución de problemas. Hace hincapié en un enfoque centrado en el ser humano, situando a las personas en el centro del proceso de innovación.”

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¿Qué tienen en común el Pensamiento crítico y el Design Thinking?

Tanto el pensamiento crítico como el Design Thinking comparten varias similitudes en su enfoque y proceso. Casi son hermanos se podría decir.

Los puntos donde más se tocan es en:

• Enfoque centrado en el problema: Tanto el pensamiento crítico como el Design Thinking se centran en abordar y resolver problemas. Ambos enfoques reconocen la importancia de comprender a fondo el problema antes de buscar soluciones.

• Consideración de múltiples perspectivas: Las dos disciplinas valoran la consideración de diferentes perspectivas y puntos de vista.
  Ambas metodologías promueven la apertura mental y la evaluación objetiva de las diferentes opciones y enfoques posibles.

• Búsqueda de soluciones creativas: Ambos fomentan la generación de ideas creativas y la exploración de soluciones innovadoras. Ambos enfoques buscan superar las limitaciones convencionales y encontrar nuevas formas de abordar los problemas.

• Iteración y mejora continua: Tienen en común estos dos proceso que reconocen la importancia de la experimentación y la iteración para llegar a soluciones efectivas. Ambas metodologías promueven la revisión constante, la retroalimentación y la mejora continua en el proceso de resolución de problemas.

• Orientación hacia la acción: Las dos disciplinas tienen en común la aplicación práctica de las ideas y soluciones generadas. Ambas metodologías buscan desarrollar soluciones viables y efectivas que puedan implementarse en la realidad.

Fortalecer el pensamiento crítico es un proceso que requiere práctica y compromiso con la mejora continua. Al aplicar los principios del pensamiento crítico en tu trabajo, podrás mejorar tus habilidades de análisis, resolución de problemas y toma de decisiones, lo que te permitirá enfrentar los desafíos laborales de manera más efectiva. Por ello para que vayas cogiendo practicidad con el pensamiento crítico empieza con el Design Thinking ya que vas sentir y probar rápidamente todos los principios del Pensamiento Crítico.

Desde DothinkLab te proponemos visitar nuestro espacio City, donde encontrarás cursos de introducción al Design Thinking con herramientas prácticas para que empieces desde ya a aplicar el pensamiento crítico en tus procesos de Innovación.